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Banco Santander renueva su apoyo al Parque Científico de la Universidad de Valladolid

Fuente: Gabinete de Comunicación de la UVa

El rector de la Universidad de Valladolid, Daniel Miguel San José, y el director general de Banco Santander y director de Santander Universidades, José Antonio Villasante, en presencia del consejero de Educación de la Junta de Castilla y León, Fernando Rey, firmaron el 30 de marzo la renovación del convenio que mantiene el Parque Científico de la UVa y el Santander a través de Santander Universidades.

El acto, que ha tenido lugar en el CTTA (Centro de Transferencia de Tecnologías Aplicadas), del Campus Miguel Delibes, ha coincidido con el XX aniversario de la firma del primer convenio entre la UVa y el Santander (7 de marzo de 1996), lo que convirtió a la universidad en la segunda en suscribir un convenio con la entidad bancaria.

Por este motivo, al acto han sido invitados todos los rectores de la Universidad de Valladolid que desde entonces han estrechado los lazos de colaboración con Banco Santander: Javier Álvarez Guisasola, Jesús María Sanz Serna, Evaristo Abril Domingo y Marcos Sacristán Represa. También han asistido el rector Fernando Tejerina; el que fuera vicerrector de Estudiantes en 1996 y gran impulsor del acuerdo, Javier Sánchez Tabernero; el anterior consejero de Educación, Juan José Mateos, y el equipo rectoral al completo.

Banco Santander es patrono del Parque Científico UVa desde la constitución de la fundación en mayo de 2006 y desde entonces su historia ha ido siempre ligada a la de la entidad. La colaboración entre ambas instituciones tiene la finalidad de reforzar los mecanismos que faciliten la transferencia de resultados de investigación a la actividad empresarial así como promover la difusión de los valores y actitudes de la cultura emprendedora en la comunidad universitaria. 

Esta colaboración se amplió en 2015 con el desarrollo del Programa YUZZ, dirigido a jóvenes de la Universidad de Valladolid con ideas innovadoras que quieran convertirlas en negocios empresariales viables, bajo la coordinación del Parque Científico. 

La relación entre el Santander y el Parque Científico UVa se ha consolidado durante estos ocho años en aras de promover la innovación, la transferencia y el emprendimiento en la comunidad universitaria de los campus de Palencia, Segovia, Soria y Valladolid; y en la sociedad de Castilla y León en general.

VEINTE AÑOS DE RELACIÓN
La colaboración del Banco Santander con la Universidad de Valladolid (UVa) se remonta al año 1996. A lo largo de estos 20 años se han firmado varios convenios para financiar o patrocinar distintos programas de becas de alumnos y titulados, encuentros institucionales (como el primer encuentro de Rectores de Universidades de Brasil, España y Portugal para conmemorar los “500 años de Brasil”, origen del actual Grupo Tordesillas, o la celebración del VIII Centenario de los Estudios Generales de Palencia), cursos de verano, eventos culturales, Grupo de Música Antigua, Coro Universitario y Joven Orquesta de la UVa, publicaciones, actividades de carácter científico y docente, implantación de nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones, ofertas especiales para los universitarios e impulso de las cátedras de Empresa Familiar y la Cátedra “Simón Ruiz” sobre la Historia del Comercio. 

Actualmente está en vigor el convenio suscrito entre la Universidad de Valladolid y Banco Santander en el año 2009, que, además de las acciones citadas, contempla otras iniciativas como el programa de movilidad internacional de estudiantes, UVa-Banco Santander, dirigido a estudiantes de Iberoamérica y Asia, becas para la formación de personal investigador de la UVa, apoyo a la dotación y mantenimiento de las Aulas Universia, el proyecto “Biblioteca Digital Santander” de manuscritos, incunables, raros y fondos históricos del S. XVI de la Biblioteca Histórica de Santa Cruz de la UVa, una investigación para el estudio de las energías renovables o la colaboración en los festivales Estival y Universijazz. Si pionera fue la UVa en la implantación de la tarjeta universitaria inteligente (carné universitario) hace ya 20 años, su continuidad ha venido recientemente con la puesta en marcha de la AppUVa, primera Universidad en implantarla en España de la mano del Santander.

Banco Santander es la empresa que más invierte en apoyo a la educación en el mundo (Informe Varkey/UNESCO-Fortune 500). A través de Santander Universidades mantiene 1.200 acuerdos de colaboración con universidades e instituciones académicas y concede más de 35.000 becas cada año.

Investigadores de la UVa desarrollan una tecnología para utilizar hidrógeno sólido como combustible

Fuente: Gabinete de Comunicación de la UVa

Un equipo de investigadores de la Universidad de Valladolid (UVa) ha desarrollado una tecnología que permite almacenar hidrógeno en estado sólido y liberarlo de forma rápida para su uso como combustible, lo que podría tener aplicación en diversos sectores, como el de la automoción.

El proyecto, denominado ‘HIDROWAVE’, ha obtenido el segundo premio en el concurso ‘Vivero Universitario de Promotores Empresariales’, un programa formativo organizado por la Consejería de Educación, a través de la Fundación Universidades y Enseñanzas Superiores de Castilla y León (FUESCYL) y con el patrocinio de Santander Universidades, cuyo objetivo es fomentar el emprendimiento universitario y la creación de empresas en este entorno.

El origen del proyecto se encuentra en el Grupo de Procesos a Alta Presión de la UVa, dirigido por María José Cocero, en concreto, en el trabajo del ahora investigador Ramón y Cajal Ángel Martín, quien empezó a trabajar en esta línea en 2011. En estos años, otros investigadores se han sumado y desarrollado el proyecto, que se ha convertido en iniciativa empresarial, Luis Miguel Sanz Moral, Miriam Rueda Noriega y Alexander Navarrete Muñoz.

El objetivo ahora, tras obtener el premio del concurso ‘Vivero Universitario de Promotores Empresariales’, es avanzar en un prototipo que ayude a validar la tecnología, que por el momento ha sido probada con éxito a nivel conceptual y a escala de laboratorio. El concurso de la Junta de Castilla y León, enmarcado en el Plan de Transferencia de Conocimiento Universidad-Empresa (T-CUE) 2015-2017, concede 6.000 euros para dotar el capital social de la nueva empresa y un apoyo, valorado en 6.000 euros, para realizar un prototipo, prueba de concepto o producto mínimo viable.

Muchos países están orientándose hacia la producción de energía a partir de fuentes renovables teniendo en cuenta los problemas que acarrean los combustibles fósiles como la aceleración del efecto invernadero, la contaminación del aire en los núcleos urbanos o la gran dependencia energética de países en muchos casos poco estables. Sin embargo, muchas fuentes renovables también suponen dificultades. Por ejemplo, la producción de energía a partir del viento o el sol es fluctuante y existen momentos de exceso o de falta de producción, por lo que es necesario disponer de tecnologías que permitan el almacenamiento de la energía generada en momentos de excedente.

En este sentido, una de las formas de hacerlo es la generación de hidrógeno, aunque su almacenaje supone un desafío. Según explica Luis Miguel Sanz Moral, uno de los promotores del proyecto, “los depósitos criogénicos para almacenarlo de forma líquida conllevan una gran penalización energética y las bombonas de hidrogeno comprimido acarrean un peligro”. Otra alternativa, precisa, “es almacenar el hidrógeno de forma compacta haciendo uso de compuestos sólidos que, al descomponerse por calentamiento, lo liberan, aunque el problema de esta tecnología es su lenta liberación y la necesidad de calentarlo para que ésta se produzca”.

Así, la alternativa que ha desarrollado el equipo de la UVa se basa en embeber estos compuestos en una matriz porosa susceptible de ser calentada mediante la acción de un campo de microondas, consiguiendo así una rápida y modulable liberación del combustible. En concreto, se han diseñado unos materiales denominados aerogeles de silicio, muy ligeros, con muy baja densidad y una alta porosidad, y han depositado en estos poros los compuestos sólidos que posteriormente liberarán el hidrógeno.

El hecho de poder aplicar microondas al calentamiento de los compuestos sólidos que liberan el hidrógeno presenta varias ventajas, según apunta el equipo investigador: el calentamiento es más eficiente (mayor al 95 por ciento), más rápido y más uniforme. De este modo, aunque inicialmente la tecnología fue pensada para vehículos de celdas de combustible de hidrógeno, podría aplicarse en todo tipo de sistema que requiera de energía de una baja penalización en peso y una alta autonomía energética.

Por ejemplo, podría emplearse en aparatos de baja potencia como aviones no tripulados o scooters, media potencia como sistemas auxiliares de generadores o generación en lugares remotos (como países en vías de desarrollo), o alta potencia como coches, autobuses o vehículos de interior como carretillas.

En proceso de patente
La tecnología planteada se encuentra en estos momentos en proceso de patente tras obtener, en 2013, una de las becas del programa Prometeo de la Fundación General de la Universidad de Valladolid, cuyo fin último es proteger resultados de proyectos y prototipos innovadores desarrollados por alumnos de la Institución académica.

Convocados los Premios de Investigación Consejo Social 2016

Fuente: Consejo Social de la UVa

El Consejo Social de la Universidad de Valladolid ha convocado sus Premios de Investigación 2016 con los que reconoce la labor de investigación que se realiza en el seno de la UVa y especialmente aquella que favorece la transferencia del conocimiento hacia la Sociedad.

Estos galardones, que ya cumplen su novena edición, se dirigen a departamentos, institutos universitarios y Grupos de Investigación Reconocidos (GIR), a los que por primera vez en esta edición se suman también las cátedras y centros de estudios de la UVa.

De entre ellos, el Consejo Social premiará a aquellos que se distingan especialmente por la consecución de contratos de investigación y por el desarrollo de actividades con empresas e instituciones.

El plazo para presentar candidaturas para estos premios concluye el próximo 15 de abril y el fallo se hará público antes del 30 del mismo mes.

El premio tiene una dotación de 6.000 euros, que deberán destinarse a la adquisición de medios materiales relacionadas con la actividad investigadora del galardonado o a la publicación o divulgación de la misma

Estos galardones, de carácter anual, constan con una segunda modalidad dirigida a Empresas e Instituciones.

En este caso el premio tiene carácter honorífico y su finalidad es reconocer a aquellas empresas e instituciones que se distingan especialmente en contratar actividades y proyectos de investigación, desarrollo científico e innovación tecnológica con la Universidad de Valladolid.

Con estos galardones el Consejo Social quiere mostrar la importancia que tiene el fomento de la investigación, el desarrollo científico y la innovación tecnológica para la Sociedad.

Asimismo, la convocatoria de estos premios se enmarca dentro de los objetivos del Consejo Social tendentes a impulsar la excelencia de la investigación universitaria y las políticas de transferencia y difusión de los resultados obtenidos en las actividades de investigación y su adecuación a las necesidades del territorio, con una mayor conexión con el tejido productivo.

Con esa finalidad, el Consejo Social ha impulsado la edición de un Catálogo de Servicios de la Actividad de Investigación de la UVa y ha puesto en marcha otras iniciativas como un programa de becas para que los estudiantes universitarios se inicien en tareas de investigación o la ronda de encuentros que ha venido manteniendo con los GIR de la UVa que servirán para elaborar un documento de análisis y propuestas sobre el papel de la investigación en la Universidad.

Premiados

Instaurados en el año 2007, en anteriores ediciones resultaron premiados en la modalidad de departamentos, institutos universitarios y grupos de investigación el Instituto de Biología y Genética Molecular (I.B.G.M.) (2007); el Instituto de Historia Simancas (2009); el GIR de "Tecnología Ambiental" (2010); el GIR de Espectroscopía Raman e Infrarrojo de Cristales y Minerales (2011), el GIR BIOFORGE (2012); el GIR Ingeniería de Procesos a Presión (2013) el GIR Modelado, Biomédica y Visualización Avanzada del Patrimonio (MoBiVAP) y el GIR Física y Química de los Sólidos, que recibió el premio en la edición convocada en 2015.

Por su parte, los galardonados en la modalidad Empresas e instituciones han sido Agroalimentaria Paraíso (2007); G. M. V. (2009); Grupo Antolín (2010); Bodegas Emilio Moro (2011); Telefónica i+D (2012); Agroseguro S. A. (2013), ABN Pipe Systems (2014) y Urbaser (2015).

BASES Premio Investigacion Consejo Social 2016

El Ministerio de Economía y Competitividad aprueba un ambicioso proyecto de la UVa para medir los aerosoles en el Ártico y en la Antártida

Fuente: Gabinete de Comunicación de la UVa

El Ministerio de Economía y Competitividad, a través de la Dirección General de Investigación Científica y Técnica, ha aprobado un ambicioso proyecto, que desarrolla el Grupo de Óptica Atmosférica (GOA) de la Universidad de Valladolid, por valor de 260.000 euros, con objeto de ahondar en las investigaciones sobre los aerosoles de la atmósfera (partículas sólidas y líquidas), vinculados al cambio climático.

Se trata del proyecto de mayor cuantía concedido a la UVa en esta convocatoria y con él podrán, entre otras cuestiones, adquirir un segundo fotómetro solar en el Ártico (aparato que mide dichas partículas a su paso por la atmósfera) y uno en la Antártida que como novedad utilizan la última tecnología para poder hacer las mediciones durante la noche y en invierno y obtener con ello una información más precisa y detallada que antes no existía, sobre todo en estas zonas en donde la luz solar escasea.

Las ayudas han sido un balón de oxígeno para dar continuidad a la línea de investigación iniciada en 1996 por el GOA, que lidera el investigador Ángel de Frutos, junto a Victoria Cachorro y Abel Calle, además de otros siete jóvenes investigadores.

La medición de los aerosoles en estas áreas es de gran interés al ser zonas de gran sensibilidad, de donde se obtienen datos que ayudan a entender los cambios que producen estas partículas cuando atraviesan la atmósfera y su repercusión en el cambio climático.

La investigación que el Grupo desarrolla gracias a estos fotómetros solares está integrada en la Red AERONET, a la que pertenece el grupo de la UVa, coordinada por la NASA con la colaboración de la Universidad de Lille (Francia). Los datos que obtiene el GOA son utilizados por la NASA a los que se puede acceder desde cualquier parte del mundo, porque son accesibles y gratuitos.

La estación de Svalvard en Noruega será el lugar de colocación del segundo fotómetro solar de la UVa en el Ártico, que completará al que ya se encuentra en la isla de Andenes, al norte de Noruega, al que se le incorporará la tecnología más avanzada para que a partir de ahora pueda realizar las mediciones con la luz de la luna. El tercero se instalará en la base argentina de la Antártida, ya que permanece abierta permanentemente a diferencia de la base española que cierra durante los meses de invierno.

La red AERONET cuenta actualmente con cerca de 500 fotómetros en el mundo, quince de los cuales son de la UVa, que son calibrados de forma estándar, una labor en la que se ha especializado el GOA ya que se ha convertido en uno de los dos centros de calibración que existen en la red, homologado por la NASA, gracias al Proyecto Europeo ACTRIS. A la azotea de la Facultad de Ciencias llegan todas las semanas fotómetros de todo el mundo para ser calibrados, es decir ajustados, tras un año de trabajo continuado en su lugar de origen, a través de un fotómetro máster o fotómetro de referencia, con el que se compara para hacer esta calibración. El equipo del GOA dispone actualmente de cuatro fotómetros máster que son utilizados para este trabajo y que a su vez tienen que ser revisados continuamente y esta labor solo se puede hacer en el Centro de Investigación Atmosférica de Izaña (AEMET), en el Parque Nacional de las Cañadas del Teide, en Tenerife, ya que posee las características atmosféricas idóneas para ello.

Estos aparatos, los fotómetros, que un día se crearon para mejorar la observación de satélites se han especializado en la captación de las características de los aerosoles en la atmósfera. “Se ha estudiado mucho el comportamiento de otras variantes que afectan al cambio climático, pero aún no se conoce bien cómo estas partículas de la atmósfera afectan también a este cambio”, explica Ángel de Frutos.

Una de las colaboraciones más destacadas que va a iniciar el grupo será con el Instituto Aeroespacial Alemán (DLR), uno de los más potentes de Europa, al que surtirán de datos de suelo que el GOA obtiene con estos fotómetros y que completan los que este instituto consigue a través de satélites.

Tres ingenieros de la UVA crean un sistema de ayuda a la conducción y de asistencia al conductor a partir de la fusión de la información de datos de diferentes sensores

Fuente:  E. Lera Innovadores-Diario de Valladolid

Es una industria con marcha. Hay un mundo más allá de las ITV, el salón del automóvil, el material de la tapicería o la marca del vehículo. Una épica sobre ruedas, donde las historias sensacionales y las nuevas tecnologías se fusionan para mejorar la vida de los conductores.

En ese universo, en el que brillan los nombres resplandecientes, los inventos se suceden tanto para los ases del volante como para aquellos donde su relación con el motor no va más allá de levantar el capó. Sea o no un explorador mecanizado, los avances siempre vienen como agua de mayo.

En este marco, aparecen tres inventores. Víctor Martínez, Carlos Meléndez y Rubén Ruiz, ingenieros de telecomunicaciones de la Universidad de Valladolid (UVA), se han apuntando un tanto al crear un sistema de ayuda a la conducción y de asistencia al conductor a partir de la fusión de la información de datos de diferentes sensores inerciales y de automoción.

ADASduPino –así se llama esta herramienta– ofrece un servicio de aviso en caso de accidentes. Para poder prestar este uso, se fusionan varios sensores del sistema como son los acelerómetros, los giróscopos, los magnetómetros, el receptor de GPS y varios dispositivos que miden las velocidades de las ruedas y el giro del volante.

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