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EL CONSEJO SOCIAL DE LA UNIVERSIDAD DE VALLADOLID APRUEBA EL PRESUPUESTO DE LA UVa PARA 2019

El Consejo Social de la Universidad de Valladolid ha dado luz verde al presupuesto de la UVa para 2019 y que asciende a 206.630.764 euros.

Así lo acordó el pleno de este órgano de participación de la sociedad en la UVa, ratificando de este modo el acuerdo adoptado por el Consejo de Gobierno de la UVa el pasado 29 de marzo.

El presupuesto de la UVa para 2019 incrementa en más de 200.000 euros la partida de becas y cerca de un 13 por ciento la partida destinada a equipamiento científico, que asciende a más de 15 millones de euros.

Sobresale también el gasto en infraestructuras, con 15,5 millones de euros destinados a diferentes actuaciones en sus cuatro campus, entre las que destacan las instalaciones generales de la Sede Mergelina de la Escuela de Ingenierías Industriales en Valladolid, la finalización del módulo I+D en Soria, la puesta en funcionamiento de la segunda fase del Campus en Segovia y actuaciones de mejora en el Campus de La Yutera de Palencia.

Además del presupuesto correspondiente a 2019, el pleno del Consejo Social también ha aprobado la auditoría de cuentas de la universidad del ejercicio presupuestario 2017.

La aprobación del presupuesto de la Universidad de Valladolid, su liquidación y la de las cuentas anuales de la institución académica son algunas de las competencias que tiene atribuidas por Ley el Consejo Social, que también es competente para emitir informe preceptivo sobre la creación y supresión de institutos universitarios de investigación, y sobre la implantación de enseñanzas conducentes a la obtención de títulos universitarios.

En este sentido, el pleno del Consejo Social informó favorablemente la creación del Instituto Universitario de Investigación en Bioingeniería e Ingeniería Biomédica y la implantación del Título Universitario de Doctor en Musicología, que será impartido por la UVa junto con la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de La Rioja.

Por otra parte, el pleno del Consejo Social acordó el nombramiento de Enrique Berzal como nuevo secretario de este órgano, vacante desde el pasado mes de noviembre tras la jubilación anticipada de su anterior titular, Pedro Valerio.

Enrique Berzal es profesor titular de Historia Contemporánea en la Universidad de Valladolid, articulista en El Norte de Castilla y colaborador en varios medios de comunicación audiovisuales y escritos desde el año 2000.

Por último, el pleno también aprobó la Memoria de Actividades de 2018 del Consejo Social, que recoge sus actuaciones encaminadas a impulsar las relaciones de la universidad con su entorno, a la búsqueda de la eficiencia y de difusión de la actividad investigadora y emprendedora.

Entre ellas figuran el Foro Universidad-Empresa, iniciativa desarrollada junto con los consejos sociales de las universidades de León, Burgos y Salamanca y la Junta de Castilla y León para analizar la empleabilidad de los titulados en Ciencias Sociales, Arte y Humanidades; la presentación del estudio “La contribución socioeconómica de la Universidad de Valladolid” o sus becas y premios de investigación.

BACTERIAS PÚRPURAS PURIFICAN Y TRANSFORMAN RESIDUOS DE GRANJAS PORCINAS EN ENERGÍA LIMPIA

Fuente: Gabinete de Comunicación de la UVa

Las granjas porcinas generan una elevada cantidad de residuos. La gestión de estos purines no es nada sencilla y se ha convertido en todo un problema para el crecimiento del sector ganadero. Actualmente, son empleados como biofertilizantes para los suelos, pero su uso no es siempre posible.

En ese sentido, el Instituto de Procesos Sostenibles (IPS) de la Universidad de Valladolid (UVa) ha desarrollado una tecnología incipiente que por primera vez acopla dos procesos secuenciales: el tratamiento de la purificación de gas biogás y la digestión anaerobia de residuos ganaderos, esta última una tecnología ya madura y asentada, para transformar estos purines altamente contaminantes en un biogás de alta pureza denominado biometano.

El microorganismo fotosintético empleado para esta transformación es una bacteria púrpura, capaz de captar la energía infrarroja del Sol y nutrirse con el fósforo, nitrógeno y materia orgánica presentes en los purines.

Estos organismos realizan una fotosíntesis anoxigénica con fijación de dióxido de carbono (CO2) y ácido sulfhídrico (H2S), lo que permite obtener el subproducto deseado: un gas natural renovable y limpio que se puede inyectar directamente en la red de gas natural o usarse como combustible en automoción.

El objetivo final es mitigar la dependencia energética y posibles problemas de abastecimiento energético por cuestiones geopolíticas. Un estudio con estas bacterias ha sido publicado recientemente por el IPS en la revista Bioresource technology.

Ya existen plantas industriales de digestión anaerobia para el tratamiento centralizado de purines, pero generalmente se encuentran alejadas de las explotaciones, lo que limita la viabilidad económica de esta estrategia de gestión. Más de diez o viente kilómetros de distancia entre la planta y la granja hace contraproducente para el ganadero la gestión centralizada de los residuos en estas plantas. En este contexto, es necesario buscar una manera de instalar pequeñas plantas en granjas y aprovechar el biogás producido en la propia explotación ganadera.

Por el momento, la investigación se encuentra en una fase inicial de laboratorio y la intención del equipo de investigadores, encabezado por Raúl Muñoz, es seguir con la validación a escala semi-industrial en procesos en continuo, un proceso para el que calculan necesitarán unos seis años.

Para poder dar ese siguiente paso en el desarrollo de esta tecnología “se requiere financiación externa”, afirma Muñoz, “es una investigación cara y que conlleva tiempo, aunque su desarrollo no es controlable solamente con parámetros económicos”.

Otras investigaciones y punto de partida
Recientemente, este mismo grupo de investigación del IPS publicó en la misma revista un trabajo con una tecnología mucho más madura en la que aplicaban el uso de microalgas para purificar el biogás producido a partir de aguas residuales en Chiclana de la Frontera (Cádiz).

En esta ocasión, los microorganismos empleados fueron microalgas que aprovechan la luz visible del sol para efectuar la fijación de CO2 y asimilación de nutrientes del agua residual.

En todo caso, estas algas no competirían con las bacterias púrpuras ya que aprovechan diferentes secciones del espectro solar. 

Antes de experimentar con este tipo de microorganismos, la gestión y transformación de los residuos orgánicos se llevaban a cabo a través de lavados a presión, tecnologías de adsorción y de separación de membrana, técnicas de alto coste e impacto ambiental que no evitaban la liberación de CO2 a la atmósfera.

Un instituto único en Castilla y León
El Instituto de Procesos Sostenibles centra sus últimas investigaciones en la misma línea: el desarrollo de procesos biológicos de bajo coste y medioambientalmente sostenibles para convertir el biogás sucio en un biomentano con calidad similar al gas natural. Procesos basados en biotecnologías que emplean una parte de la luz solar para llevar a cabo esa purificación y transformación del gas. Es el único instituto universitario de excelencia de Castilla y León.

Raúl Muñoz, el investigador que lidera las líneas de tratamiento biológico de gases y depuración de aguas con microalgas, ha sido recientemente galardonado por la Real Academia de Ingeniería Española como mejor Investigador joven y con el premio Bankia Joven Innovador por sus trabajos para mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero y sus consecuencias.

Bibliografía
David Marín, Esther Posada, Dimas García, Daniel Puyol, Raquel Lebrero, Raúl Muñoz. “Assessing the potential of purple phototrophic bacteria for the simultaneous treatment of piggery wastewater and upgrading of biogás”. Bioresource Technology. Volume 281, June 2019, Pages 10-17. https://doi.org/10.1016/j.biortech.2019.02.073

EL CORDYCEPS MILITARIS, EL HONGO SILVESTRE QUE ACABA CON LA PROCESIONARIA DEL PINO, SEGÚN UN ESTUDIO DE LA CÁTEDRA DE MICOLOGÍA DE LA UVA

Fuente: Gabinete de Comunicación de la UVa

La plaga de la procesionaria del pino puede controlarse eficazmente con el Cordyceps militaris, un hongo medicinal que ataca a los insectos, según el resultado de los estudios realizados por la Cátedra de Micología de la ETS de Ingenierías Agrarias del Campus de la UVa en Palencia.

Los investigadores han testado en los pinares de pino piñonero del Cerrato (Palencia) que esta especie micológica ejerce sobre las orugas un control biológico eficaz como ecoinsecticida natural, según informa el director de la Cátedra, Juan Andrés Oria de Rueda.

La oruga de la procesionaria del pino es una de las plagas más destructivas de los bosques mediterráneos y también de parques y jardines, provocando además numerosas alergias.

Especialmente graves están siendo este año sus ataques en pinares y parques, debido a las altas temperaturas del invierno, hasta el punto de que se están registrando incluso sus efectos en lugares de alta montaña, donde no se había visto hasta ahora.

Al inusual calor, hay que sumar la escasez de lluvias de estos últimos meses, lo que está adelantando los efectos de la procesionaria en los bosques de todo el territorio español. En concreto, en Castilla y León este problema de salud forestal y social es acuciante, pero también en Cataluña, Valencia, Castilla-La Mancha, Madrid, Extremadura, Galicia o Andalucía se están viendo especialmente afectados.

La presencia de las orugas de procesionaria se delata por los característicos bolsones blancos y sedosos en las ramas de los árboles, sobre todo en pinos y cedros, donde se guarecen sus colonias.

En primavera descienden en largas filas o procesiones, de donde viene su nombre, hasta el suelo, donde se entierran y pasan a pupas a través de su metamorfosis.

Es en este proceso cuando pueden afectar a la salud de niños y mascotas, ya que las orugas están recubiertas de pelos urticantes que dan lugar a irritaciones graves y que, en el caso de los perros, les puede llegar a causar la muerte.

Si bien hay distintas aves insectívoras capaces de controlar a estos insectos como las abubillas, cucos, críalos, chotacabras (come polillas adultas) y otros pájaros pequeños (carboneros y herrerillos capuchinos), varias de estas especies son migratorias y a veces no llegan antes de que las orugas desciendan de los árboles y se hayan enterrado.

Cuando esto ocurre puede suceder que los perros que escarban o remueven el suelo pueden verse más gravemente afectados, pues los pelos urticantes de las orugas se les clavan como flechas y les producen una severa inflamación.

Los investigadores de la Cátedra de Micología, tras los estudios realizados en los dos últimos años en colaboración con empresas de jardinería y otras especializadas, encontraron que los hongos silvestres como el Cordyceps militaris, de forma de maza y color naranja, localizados en la comarca palentina del Cerrato pueden llegar a acabar con más del 80 % de las orugas de la procesionaria enterradas, resultando inofensivo el tratamiento, según ha declarado el director de la Cátedra.

Alguna cepa incluso llega a eliminar al 90-100% de las orugas y pupas afectadas, lo cual es de una eficacia sorprendente. Una vez que se selecciona la cepa o variedad de hongo ecoinsecticida más eficaz frente a la procesionaria se procede a replicar el hongo para posteriormente hacerlo multiplicar a gran escala. Entonces se hace el tratamiento en monte pulverizando una solución de agua con esporas.

Las ventajas de la utilización del hongo ecoinsecticida Cordyceps es múltiple, por un lado, se trata de un tratamiento ecológico natural que evita la utilización de productos químicos agresivos; y por otro, el hongo estudiado no es perjudicial para personas y animales domésticos, solamente para las orugas y pupas de la plaga, produciendo esporas que se dispersan por el aire hasta que se ven interceptadas por los pelos de las orugas.

De las nueve cepas o variedades diferentes del hongo observadas en la investigación, parece que la procedente de pinares mediterráneos más secos y continentales del pino albar o piñonero (Pinus pinea) es la más activa y eficaz contra la plaga, en comparación con las procedentes de comarcas más lluviosas y frías, que parecen requerir mayor humedad.

Por los datos recogidos en el estudio, estos hongos del Cerrato son capaces de desarrollarse y atacar con éxito a la plaga de la procesionaria en condiciones de mayor escasez de humedad y oscilación de temperaturas, con un efecto más rápido y letal en los insectos.

El hongo ascomicete Cordyceps, no solo ataca con éxito como parásito ecológico a la plaga de la procesionaria sin perjudicar a las personas o mascotas; sino que es benéfico y medicinal, con multitud de aplicaciones gracias a la Cordicepina, una sustancia activa que contiene con propiedades antibióticas, antivíricas, anticancerígenas y estimula el sistema inmunitario.

También se ha empleado con éxito por los atletas para mejorar sus resultados y en trasplantados de órganos para evitar el rechazo. “Hay 500 especies del género Cordyceps con numerosas variedades. Pero la encontrada en el Cerrato parece ser la más eficaz contra la procesionaria y posiblemente de efectos medicinales más que positivos” comenta el director de la Cátedra de Micología Juan Andrés Oria de Rueda.

Un estudio sobre el lenguaje en los niños con pérdida auditiva congénita desarrollado en la Facultad de Medicina de la UVa, Premio FIAPAS 2018

Fuente: Gabinete de Comunicación de la UVa

El Grupo SERENDIPIA, del Grado de Logopedia de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valladolid, ha recibido el Premio FIAPAS 2018 otorgado por la Confederación Española de Familias de Personas Sordas por su proyecto de investigación sobre el “Desarrollo del lenguaje en niños con detección temprana de la hipoacusia neonatal”.

El trabajo analiza la evolución y el desarrollo del lenguaje oral, de un grupo de niños y niñas detectados y diagnosticados precozmente de una pérdida auditiva congénita (hipocausia bilateral prelocutiva), dentro del Programa de Detección Precoz de la Sordera Infantil, y que se han beneficiado de una intervención temprana. Entre otras conclusiones, el estudio señala que, en torno a los siete años de edad, con carácter general, este grupo de niños había alcanzado unos rangos normalizados de lenguaje.


“Estamos investigando cuándo el lenguaje y la comunicación de los niños con discapacidad auditiva detectada al nacer, se equiparan con la de los niños oyentes, y sospechamos que es a la edad de los siete años, según las pruebas que les estamos haciendo. En los primeros años de vida hemos visto que hay un desfase lingüístico muy importante, hasta que se les ponen los recursos adecuados (implantes cocleares, audífonos, etc.) para que el niño comience a escuchar y se inicia la intervención logopédica.

Una vez hecho esto, detectamos que la distancia entre unos y otros se acorta, y hacia los siete años ya se normaliza, de forma que hay niños con 12-13 años que tienen un lenguaje oral y una comunicación estupenda para la pérdida auditiva que tienen, comparable con la de los niños oyentes”, señala la doctora Belén Santiago, profesora del Dpto. de Pedagogía en el Grado en Logopedia de la UVa y coordinadora del Grupo SERENDIPIA.


Para realizar el estudio se constituyó en el año 2015 en la Facultad de Medicina de la UVa, un equipo de trabajo del que forman parte logopedas y estudiantes de este Grado, codirigido por la propia Belén Santiago; el doctor José Ignacio Benito Orejas, del Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Clínico Universitario; y el psicólogo, Ángel Luis Sánchez Rosso.


Desde entonces han analizado a más de 75 niños con discapacidad auditiva a los que desde los tres hasta los 15 años, les someten a pruebas de lenguaje para comprobar su expresión, articulación, lectoescritura o discriminación auditiva; y comprobar su evolución comparándola con 80 niños oyentes de ese tramo de edad que participan también voluntariamente en el Proyecto como individuos de control.


Las pruebas realizadas sirven para “hacer una foto fija y saber cómo están los niños, presentando en ocasiones mayor alteración del lenguaje de lo que los padres piensan”, señala Belén Santiago, quien insiste en la importancia de la detección precoz para poder intervenir de forma inmediata: “El `ya hablará´ no lo podemos permitir, eso era antes.

A partir del año ya tienen que empezar a decir palabras, si sospechamos algo hay que llevarlo al pediatra para que lo derive al otorrino y ver si tiene una pérdida auditiva. Desde luego ahora mismo con todo lo que se conoce sobre este tema, no hay que perder un minuto, la detección precoz es fundamental y los beneficios a la larga son estupendos”.


La coordinadora del Grupo de SERENDIPIA apunta también algunas señales de alerta que pueden delatar que hay pérdida de audición entre los niños: “Según la edad varían los síntomas, pero la familia debe desconfiar cuando un bebé no se sobresalta con un ruido fuerte, si la voz de la madre no le tranquiliza, no se gira cuando alguien le habla o ante ruidos familiares, no balbucea, o reacciona más positivamente a las vibraciones y al tacto, que al sonido.


A partir de los dos años, si no presta atención a los sonidos del entorno y está como muy metido en su actividad y todo el ruido parece que no va con él, no entiende órdenes sencillas sin apoyo visual, hay que consultar con el pediatra.

Y si a pesar de estas señales llega a los 4-5 años sin un diagnóstico, el hecho de no sepa contar lo que le pasa o mantener una conversación sencilla, o si su lenguaje no es comprensible para su entorno; si en el cole son niños con falta de atención y de concentración, síntomas confundidos a veces con problemas de aprendizaje, hiperactividad o falta de estimulación lingüística, son señales que deberían alertarnos.


Además, hay que vigilar a aquellos niños con frecuentes otitis serosas, y como norma, se recomienda explorar la audición de todos aquellos niños con poca capacidad de atención, falta de interés por las tareas escolares o se muestren poco comunicativos”.


El Proyecto ha puesto de manifiesto la importancia de la detección precoz de la pérdida auditiva, así como de una temprana y adecuada adaptación protésica e intervención logopédica, y la extraordinaria importancia que tiene la colaboración y participación activa de la familia en todo el proceso de rehabilitación, ya que cuando este pilar falla, los resultados en la adquisición y el desarrollo del lenguaje no son tan halagüeños.


También ha servido para detectar la dificultad que tienen los jóvenes con discapacidad auditiva en la lectoescritura, lo que ha generado que el Grupo haya abierto una nueva línea de investigación para medir esta competencia. “Queremos evaluar cómo es la lectoescritura en estos chicos porque muchas veces a simple vista parece que tienen un lenguaje estupendo, una comunicación fluida para el día a día, pero hemos visto que en la lectoescritura, en la elaboración de textos, por ejemplo, en la redacción de exámenes tienen dificultades”, concluye Santiago.


Además del reconocimiento del Premio FIAPAS, el Proyecto ha logrado cinco becas del Ministerio de Educación y Cultura y de la Uva; la publicación de dos artículos en revistas especializadas (Revista de investigación en Logopedia y Revista de ORL), tres comunicaciones nacionales y seis TFG (en el Grado en Logopedia de la Uva); y una ayuda para el proyecto de investigación en Biomedicina seleccionado para desarrollar en los centros de la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León en 2018. GRS 1497/A/17″.


Premio FIAPAS


La Confederación Española de Familias de Personas Sordas – FIAPAS es una organización sin ánimo de lucro, con implantación estatal, que constituye la mayor plataforma de representación de las familias de personas sordas de nuestro país. Desde hace 16 ediciones otorga el Premio FIAPAS con el que reconoce las labores de investigación en deficiencias auditivas, de aplicación en las categorías de Sanidad, Educación y Accesibilidad.


En esta edición, el Jurado integrado por un comité científico formado por Eulalia Juan, audióloga en el Hospital Son Llàtzer de Palma de Mallorca; la Dra. María José Lavilla, presidenta de la Comisión de Audiología de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL); el Dr. Jaime Marco, presidente de la SEORL; Carmen Jaúdenes, directora de FIAPAS; y Jose Luis Aedo, presidente de FIAPAS, otorgó el Premio FIAPAS en la categoría de Educación al Grupo SERENDIPIA de la Universidad de Valladolid.

FINALIZA EL PLAZO DE PRESENTACIÓN DE CANDIDATURAS PARA OPTAR AL PREMIO DE INVESTIGACIÓN 2019 DEL CONSEJO SOCIAL

El 15 de marzo concluyó el plazo para presentar candidaturas al Premio de Investigación Consejo Social 2019, un galardón que tiene como objetivo reconocer la labor de investigación y transferencia de conocimientos que se desarrolla en el seno de la Universidad de Valladolid.

El premio está abierto a departamentos, cátedras, centros de estudios, institutos universitarios y Grupos de Investigación Reconocidos (GIR) de la UVa que destaquen especialmente por la consecución de contratos de investigación, y por el desarrollo de actividades con empresas e instituciones.

Para optar a este premio, los aspirantes pudieron presentar sus candidaturas en el Registro Central o en el Registro Electrónico de la Universidad, mediante un escrito dirigido al Consejo Social en el que hicieron constar los méritos que consideren oportunos.

El premio tiene una dotación económica de 6.000 euros, que deberán destinarse a la adquisición de medios materiales relacionadas con la actividad investigadora del galardonado o a la publicación o divulgación de la misma. El jurado dará a conocer su fallo antes del 30 de abril.

Las bases del Premio de Investigación Consejo Social 2019 se pueden consultar aquí: http://consejosocial.uva.es/premios/.

La convocatoria de este premio se enmarca dentro de los objetivos del Consejo Social tendentes a impulsar la excelencia de la investigación universitaria y las políticas de transferencia y difusión de los resultados obtenidos en las actividades de investigación y su adecuación a las necesidades del territorio, con una mayor conexión con el tejido productivo.